Tratamientos mínimamente invasivos

Avances contra el cáncer de próstata

Estos procedimientos pueden utilizarse en pacientes con neoplasias iniciales o que se encuentren confinados. Permite una recuperación más rápida y el riesgo de infecciones o pérdidas de sangre es mínimo debido a que las incisiones son más pequeñas.

Dr. NICANOR RODRÍGUEZ / Urología Laparoscópica y Oncológica

Los tratamientos mínimamente invasivos para el cáncer de próstata pueden ofrecer una serie de beneficios para los pacientes si los comparamos con otros procedimientos de mayor envergadura. Sin embargo, es importante recordar que cada paciente es único y que los beneficios específicos pueden variar según la técnica utilizada, la etapa y el tipo de cáncer que padece la persona.
“Antes de decidir cualquier tratamiento, es esencial discutir las opciones con un equipo médico especializado en cáncer de próstata para comprender plenamente los posibles beneficios y riesgos en la situación particular”, aclara el doctor Nicanor Rodríguez, urólogo general y oncólogo en Detecta Clínica.
Existen varios tratamientos mínimamente invasivos para el cáncer de próstata que buscan eliminar o controlar el tumor sin la necesidad de realizar cirugías abiertas. En ese sentido, es importante tener en cuenta que la elección del tratamiento depende del estadio y la agresividad de la enfermedad, así como de la salud general del paciente.
“Estos tratamientos el cáncer de próstata pueden ser adecuados en varios escenarios y tipos de pacientes, pero la selección del tratamiento depende de varios factores, incluyendo el estadio y grado del cáncer, la salud general del paciente y las preferencias individuales”, indica el doctor Rodríguez Gutarra.
Este tipo de procedimientos mínimamente invasivos se pueden practicar cuando el cáncer se encuentra confinado a la próstata y no se ha diseminado a otros órganos o tejidos. En estos casos se realizan la cirugía laparoscópica, la prostatectomía robótica, la braquiterapia y la terapia focal. Además, estos procedimientos son recomendados en pacientes que tienen una buena salud general y una esperanza de vida significativa. Los tratamientos mínimamente invasivos permiten minimizar el impacto en su calidad de vida y recuperación.
“Estos procedimientos también son útiles en el cáncer de próstata con un riesgo bajo o intermedio bajo, donde el tumor es menos agresivo y menos propenso a propagarse. También se pueden realizar en algunos casos de cáncer de próstata localmente avanzado, donde el tumor ha crecido más allá de la próstata pero aún no ha alcanzado órganos distantes”, detalla el especialista de Detecta Clínica.

Beneficios de los procedimientos

Las técnicas mínimamente invasivas generalmente requieren incisiones más pequeñas que las cirugías abiertas tradicionales, lo que resulta en menos daño a los tejidos circundantes y una recuperación más rápida. Asimismo, debido a las incisiones más pequeñas y al daño tisular reducido, los pacientes que se someten a estos tratamientos a menudo experimentan menos dolor postoperatorio.
“La recuperación es más corta en comparación con las cirugías abiertas y los pacientes pueden regresar a sus actividades diarias con mayor rapidez. A ello se suma que las incisiones más pequeñas y la menor manipulación de los tejidos pueden reducir el riesgo de infección postoperatoria. Con este tipo de cirugías también minimiza la posibilidad de pérdida de sangre, lo que puede reducir la necesidad de transfusiones sanguíneas”, dice Rodríguez.
En algunos casos, los tratamientos mínimamente invasivos, como la terapia focal, pueden ayudar a preservar la función eréctil y la continencia al minimizar el daño a los tejidos sanos circundantes.

A la vanguardia

Detecta Clínica ofrece procedimientos mínimamente invasivos para combatir el cáncer de próstata en los que se utilizan equipos especializados en tecnología médica de vanguardia. Algunos de los equipos y tecnologías son:
Sistemas laparoscopia 3D: Como el sistema storz, que se utiliza en cirugías laparoscópicas para proporcionar a los cirujanos precisión y control.
Equipos de laparoscopia: Incluyendo cámaras laparoscópicas de alta definición y herramientas quirúrgicas.
Sistemas de ultrasonido: Pueden ser utilizados para guiar procedimientos como la biopsia o la terapia focal.
Equipos de imagen: Incluyendo resonancia magnética (RM), tomografía computarizada (TC) y equipos de ecografía de alta resolución para la planificación y guía de tratamientos.
Equipos de anestesia y monitorización: Para garantizar la comodidad y seguridad del paciente durante los procedimientos.
Herramientas y dispositivos específicos: Dependiendo del tipo de procedimiento, se pueden utilizar herramientas y dispositivos diseñados específicamente para tratamientos mínimamente invasivos.

¿Cómo es el postoperatorio?